De algo se muere el buey

Por Gerardo Abreu Ríos

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De algo se muere el buey.

Como es conocido por ley el ganado mayor en Cuba se comercializa a través del estado, por lo que cuando un buey se accidenta y se hace inservible para los quehaceres de ese campesino la única forma de venta es a la Granja encargada para tales asuntos, así a mi difunto tío Chicho se le desnucó un toro y mi tío que era muy suspicaz, busco a un ayudante y ellos dos solos descuartizaron el animal, cuando el comprador llegó con su carro y cargó, antes de salir le pregunto a Chicho, ¿y este animal no tenía Nuca? Y mi tío le contesto: -¡De eso mismo murió!

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Ocurrencias del “Mantuano”

Como hemos escrito otras veces, el poeta repentista Jesús Serrano conocido por el mantuano, allá por el año 1993, en pleno periodo especial en Cuba, regresaba de un evento de las provincias orientales con otros poetas, entre los que venía Emiliano Saldiñas y cuenta éste que al bajarse y entrar a una cafetería, de las que hay en la autopista y le llaman “Conejito” al leer la tabla de anuncios de la oferta de productos, solo aparecían: pan con huevo hervido y refresco de remolacha, Jesús  quedo pensativo a la vez que observaba con detenimiento a una muchacha muy agraciada de cuerpo hermoso que allí se encontraba y la camarera le preguntó que deseaba comprar, teniendo que repetir tres veces la misma pregunta, hasta que el mantuano le respondió poéticamente: ¡-Me despacha un pan con huevo/ refresco de remolacha/ las nalgas de esa muchacha/ y dígame que le debo!