Entre la vaca y la puerca

Por Luis Hernández

DIJO LA VACA

Soy una señora vaca

Trasladada de Campeche,

Te doy la sabrosa leche

Si sabes cambiar mi estaca.

Mi calidad se destaca

En el momento oportuno

Daño no causo ninguno;

Es muy grato mi destino

Porque brindo al campesino

Diariamente el desayuno.

 

 

 

 

Y DIJO LA PUERCA…

Tú pastas en el potrero

Tienes muy buen porvenir,

Y a la hora de parir

Pares un solo ternero.

Yo, con rostro pordiosero,

Con mínimas atenciones

Royendo hasta los troncones,

Sin poseer don ni fama,

Fabrico muy bien mi cama

Y paro quince lechones.

LA VACA…

Soy humilde, soy sencilla,

Pero de muy buen progreso

Ofrezco la leche, el queso

Y ofrezco la mantequilla.

No me la doy de pepilla

Pero mi gran esplendor

Es próspero surtidor

Y aunque algunos me critican

Cuando a mí me sacrifican

Lleno el refrigerador.

LA PUERCA…

Yo paro  quince lechones

Y resplandezco en la casa,

Con el olor de mi grasa

Y mis gratos chicharrones.

Fríen hasta mis riñones

Con mi carne hacen  croquetas,

Y mis sabrosas chuletas,

Son adornos en la mesa

Que brindan, con fortaleza,

La más variada receta.

LA VACA…

Sabes que soy una diosa

Aunque yo paro un ternero,

Pero yo  ofrezco mi cuero

Y una carne deliciosa.

Me mantengo fuerte, hermosa,

Me mantengo siempre quieta

Sin simular, sin piruetas

Pero si mantengo el don

Mi carne y mi leche, son,

Maravillas  de una dieta

LA PUERCA…

Aunque mi tiempo caduca

Por mi utilidad, sonríen

Porque con mi grasa fríen

Plátanos, malanga y yuca.

Me codicia, Pancho,  Lucas

Alicia, María, Teresa,

Raúl y Pedro Corteza

Un viejo ya muy adulto

Porque sabe que resulto

Muy deliciosa en la mesa.

 

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