La Economía en Mantua a Finales del Siglo XIX y Principios del siglo XX

La agricultura mantuana en 1899 contaba con 762 fincas, el 53% de las mismas ocupada por bosques altos y bajos. En ese año se cultivaba solamente el 11% de dichas fincas. Si comparamos con el año 1887 en que se cultivó el 15%, se observa un decrecimiento del 4% del uso productivo de la tierra, pero además en Mantua no existían fábricas ni industrias por lo que la agricultura era la única fuente de empleo y modo de subsistencia que existía.

El 88% de esa población era analfabeta y semianalfabeta, el 99% de los niños menores de 10 años eran analfabetos y solo 11 personas tenían conocimientos superiores en el territorio.

El gobierno no sufrió transformaciones en sus figuras representativas, pero si sufrió transformaciones en su estructura  de funcionamiento. José Fors y Perdomo (alcalde) logró suprimir la junta administrativa de Dimas, que funcionó durante la reconcentración de Weyler, pasando Dimas a ser  parte nuevamente del Ayuntamiento de Mantua.

  A pesar de no sufrir grandes cambios y transformaciones el término (municipio) de Mantua, como parte integrante de la nación, también sintió el rigor del momento histórico que se vivía, la primera intervención militar norteamericana de 1898 hasta 1902.

La economía de Mantua a finales del siglo XIX y durante las primeras décadas del siglo XX se sustentaba en dos ramas fundamentales: La agricultura y la actividad pesquera.

El territorio de Mantua era eminentemente agrícola. En 1899 tenía 762 fincas ocupadas por bosques, más del 53% de ellas y solo el 11% de las mismas se cultivaban. El 80% de estas fincas eran propiedad de los terratenientes y latifundistas. Los principales productos agrícolas que se cultivaban eran el tabaco, algunos frutos menores y viandas; también se desarrollaba la actividad de la apicultura, pues la miel de abeja era utilizada en la alimentación al sustituir el azúcar de caña en muchos renglones de la alimentación, es importante destacar que la miel constituía un producto de exportación.

A continuación se ilustra la producción de miel de abeja según coteja el censo agrícola de 1946.

La tabla anterior muestra la producción de miel en el territorio a pesar de ser un número reducido de fincas las que informaron su producción.

La resina de pino era otro producto exportable pues se extraía y era utilizada como materia prima para la industria fuera del territorio.

El tabaco era el principal renglón económico de la agricultura, en el año 1914 se produjeron 10 000 tercios de la aromática rama.

La prensa de la época destaca la producción del tabaco y otros productos agrícolas.

El veguero de Montezuelo no sólo cosechaba su famoso tabaco de tripa, sino también boniatos, ñame, papa y yuca, para su consumo y le sobra para suministrarle de estos últimos tubérculos a los lugares vecinos y aún a la capital de la provincia.

El desarrollo económico en Mantua a partir de la década de 1940 tomó otro rumbo; si bien sigue siendo la agricultura y dentro de ella el tabaco el renglón fundamental; la ganadería se convierte ahora en el segundo rubro desplazando a la actividad pesquera a un  tercer lugar.

Los datos que se ilustran en la tabla siguiente demuestran el desarrollo alcanzado por la ganadería y la agricultura según coteja el censo agrícola del año 1946.

INGRESOS OBTENIDOS POR LA GANADERÍA Y LA AGRICULTURA EN EL AÑO 1945.

  Los datos anteriores demuestran el desarrollo de la agricultura y la ganadería en el territorio donde se destacan algunos renglones como el tabaco y las viandas, también resaltan el estancamiento de otros renglones que en tiempos de la colonia  se producían como el café, la caña y los productos forestales. El 60,3% del ingreso obtenido en el año corresponden a la ganadería y al tabaco.

La producción de viandas es otra rama importante dentro de la agricultura; los productos de mayor producción son el boniato y la malanga. En el año 1945 el municipio tuvo una producción de 23,571 quintales métricos de boniato destacándose dentro de los 25 municipios del país que alcanzaron el 60,5 % de la producción nacional. En el caso de la malanga blanca su producción fue por encima de los diez mil quintales métricos (10 428).

En el año 1946 existían en Mantua 1 205 fincas dedicadas a la cría de ganado vacuno con 22286 cabezas de ganado, de ellas 7940 eran vacas dedicada a la cría y a la producción de leche y 4643 eran bueyes dedicados al trabajo agrícola.

A fines del siglo XIX y durante las primeras décadas del siglo XX la actividad pesquera fue el segundo rubro  fundamental de la economía de Mantua donde  debido a la existencia de dos pequeños puertos: Los Arroyos y Dimas.